Capítulo 384. En el bando de los vencidos.

Vosotros, criminales que estáis ante los jueces,
Vosotros, criminales en las cárceles, asesinos encadenados y maniatados con hierros,
¿Quién soy yo para no estar también ante los jueces o en la cárcel?,
Yo, tan cruel y demoníaco como cualquiera, ¿por qué no están mis manos aprisionadas con hierros, y mis tobillos?

Vosotras, prostitutas, que os pavoneáis en las aceras, u obscenas en vuestras alcobas,
¿Quién soy yo para llamaros mas obscenas que yo?

¡Oh, culpable! ¡Lo confieso - me entrego y me exhibo!
(Oh, mis admiradores, no me alabéis - no me lisonjeéis - me avergonzáis,
Veo lo que vosotros no veis - sé lo que vosotros no sabéis.)

Dentro de mi pecho yazgo manchado, emporcado, sofocado,
Bajo este rostro que parece tan impasible, corren de continuo las olas del infierno,
Me agradan las lujurias y las perversidades,
Ando con los delincuentes, lleno de amor apasionado,
Siento que soy uno de ellos - pertenezco a esos criminales y prostitutas,
Y desde hoy no les negaré - ¿pues cómo podría negarme a mí mismo?

----------

You felons on trial in courts;
You convicts in prison-cells—you sentenced assassins, chain’d and hand-cuff’d with iron;
Who am I, too, that I am not on trial, or in prison?
Me, ruthless and devilish as any, that my wrists are not chain’d with iron, or my ankles with iron?
  
You prostitutes flaunting over the trottoirs, or obscene in your rooms,
Who am I, that I should call you more obscene than myself?
  
O culpable!
I acknowledge—I exposé!
(O admirers! praise not me! compliment not me! you make me wince,
I see what you do not—I know what you do not.)
  
Inside these breast-bones I lie smutch’d and choked;
Beneath this face that appears so impassive, hell’s tides continually run;
Lusts and wickedness are acceptable to me;
I walk with delinquents with passionate love;
I feel I am of them—I belong to those convicts and prostitutes myself,
And henceforth I will not deny them—for how can I deny myself?

W.W.

Comentarios